miércoles, 20 de agosto de 2014
Ejecución del ciudadano Capeto
Pará¡ás, 21.1.1793 - œLa guillotina ha
acabado hoy con la vida del rey Luis
XVI. En los documentos oficiales consta que quien ha muerto es el ciudadano Luis Capeto, acusado de una
larga serie de crá¡ámenes contra el
pueblo francá‚ás.
El monarca, al morir, tená¡áa 38 aá¤áos;
habá¡áa llegado al trono cuando acababa
de cumplir los 20, en 1774. En los a-
á¤áos iniciales de su reinado gozá¢á de
una considerable popularidad, aunque
su mujer, Mará¡áa Antonieta, era quien
en realidad ejercá¡áa la mayor influen-
cia polá¡ática. La crisis econá¢ámica y
el estallido de la revoluciá¢án supera-
ron al rey, que quedá¢á preso en sus
propias contradicciones: se opuso al
establecimiento de los derechos del
hombre, pero terminá¢á aceptá ándolos ba-
jo la presiá¢án de las masas; jurá¢á la
constituciá¢án de 1790, pero un aá¤áo má ás
tarde la traicioná¢á y llamá¢á en socorro
de la monarquá¡áa a las potencias ex-
tranjeras. A pesar de todo, los gi-
rondinos han defendido hasta el á£áltimo
momento la vida del rey: argumentaban
que su muerte sá¢álo servirá¡áa para dar
pretextos a los enemigos de Francia.
Juzgado por la Convenciá¢án entre di-
ciembre de 1792 y enero de 1793, el
rey fue condenado a muerte por pocos
votos de diferencia. La noticia de la
ejecuciá¢án de Luis XVI ha conmovido
profundamente en el exterior. Contra
la revoluciá¢án francesa se ha formado
ahora una importante coaliciá¢án, en la
que intervienen casi todos los esta-
dos europeos. Los girondinos se alza-
ron en mayo de 1793 contra el predo-
minio de los jacobinos y llegaron a
un acuerdo con las fuerzas moná árquicas. Como respuesta, los ”sans-culottes•
lanzaron su ofensiva polá¡ática en Pará¡ás: en esos mismos dá¡áas, el ejá‚árcito
francá‚ás sufrá¡áa duras derrotas en el
frente, gracias a la traiciá¢án del
general en jefe de las tropas republicanas, Dumouriez, que se habá¡áa pasado al enemigo. El poder se desplazá¢á
hacia los elementos má ás radicales yÜj Ü Robespierre se convirtiá¢á en el verdadero detentador del poder, como jefe
del á¢árgano ejecutivo de la Convenciá¢án
nacional. El Comitá‚á de salvaciá¢án pá£áblica queda entonces bajo la presiá¢án
directa de los elementos de la extrema
izquierda, que, junto con el terror,
imponen avanzadas medidas sociales,
entre ellas la fijaciá¢án de precios
má áximos para los productos de primera
necesidad, y fracasan al intentar
que se dicte una ley para la distribuciá¢án de la tierra entre los campesinos pobres.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario